El régimen de Nicolás Maduro pretende cercenar la calidad educativa que ha tenido Venezuela a lo largo de su historia, al otorgar el título de docencia a bachilleres con solo 4 meses de preparación académica, lo que, sin duda alguna, es un atentado contra el gremio docente del país.
Así lo manifestó el coordinador nacional de educación del Movimiento de Trabajadores de Voluntad Popular, René Zapata, quien cuestionó la medida y aprovechó la oportunidad para invitar a los padres y representantes a que también se opongan.
Hoy denunciamos a Aristóbulo Istúriz por pretender cercenar la calidad educativa de nuestro país al nombrar como docentes a unos bachilleres con una preparación de solo 450 horas, cuando un maestro debe prepararse al menos durante cinco años, sin contar las maestrías y especialidades, precisó.
Acompañado por miembros de la Operación Libertad Sindical y Gremial, representantes de sectores educativos y dirigencia de la tolda naranja, Zapata además denunció la violación del contrato colectivo y las precarias condiciones en las que se encuentran las escuelas venezolanas.
Han venido violentando la contratación colectiva ya que nos adeudan un 185%. A esta fecha, lo único que pagaron fue el bono vacacional. Los maestros no contamos ni con un seguro HCM ni funerario. Cuando los docentes se enferman, no tienen más remedio que ir a un hospital, donde muchas veces salimos más enfermos de lo que entramos, y cada vez que un compañero fallece, tenemos que salir a la calle a hacer recolecta para poder enterrarlo.
Exigió al régimen de Nicolás Maduro mejorar las condiciones de los trabajadores del sector educativo venezolano y fijar sus honorarios en $500 mensuales.
Hay alrededor de 140 mil docentes que han renunciado a dar clase y el 35% de los alumnos se ha ido del país. Si no quieren que los docentes emigren de las aulas, paguen un salario digno. Un docente no vive hoy con un sueldo mínimo.
Finalmente, alertó a los padres y representantes sobre el peligro que corre la educación de sus hijos y les exhortó a unir esfuerzos para reclamar un futuro de calidad. No podemos permitir que sigan cercenando la calidad educativa y por eso hacemos una alerta a los padres y representantes: no nos quedemos de manos atadas y entendamos que la calidad de la educación de este país depende de todos.
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