La comida particular en Cuba está mejor valorada y tiene más éxito que la estatal. Las razones de la afirmación se basan en la calidad de las cocinas propias y la mala higiene de los establecimientos del gobierno.
HispanoPost salió a las calles de La Habana para comprobar por qué las cafeterías estatales tienen tan mala fama y la sociedad cubana prefiere gastar un poco más en los locales particulares.